Más de $3.800 millones se invertirán en el programa de incentivos a la conservación
Se destinarán $1.617 millones para el cuidado de 1.619 hectáreas que circundan las microcuencas y$2.252 millones para la protección de 1.273 hectáreas del páramo de Guerrero.
En el coliseo de la Institución Educativa Mariano Santamaría, de San Antonio del Tequendama, se realizó la suscripción de los primeros 15 acuerdos colectivos del programa de incentivos a la conservación.
Fue así como se pactaron acciones de restauración y cuidado del agua, a través de un trabajo articulado entre la Administración Departamental, la Secretaría del Ambiente, la Corporación Autónoma Regional de Cundinamarca (CAR), la Corporación MásBosques, los acueductos veredales y la comunidad, permitiendo el cuidado de cerca de 1.619 hectáreas que circundan las microcuencas, con una inversión aproximada de $1.617.666.895.
“De esta manera ya tenemos la firma de 15 acuerdos con Vianí, San Bernardo, Pasca, El Rosal, Chaguaní, Gutiérrez, Fusagasugá, Fosca, Cáqueza, Sasaima, Suesca, Granada, Arbeláez, Cota, que tiene un resguardo indígena y San Antonio del Tequendama”, señaló la secretaría del Ambiente, Nidia Clemencia Riaño.
Con dicha firma se benefician los recursos naturales de estos municipios y se ratifica el compromiso de la comunidad con la conservación de áreas de importancia estratégica y recarga hídrica en las principales cuencas abastecedoras de agua, beneficiando a 759 familias y 500 más pertenecientes al Resguardo Indígena de Cota, además de contribuir a mejorar los servicios ambientales, culturales, espirituales y de recreación.
A su vez, se efectuó la firma del convenio de asociación entre la Secretaría del Ambiente y el Fondo ‘Agua Somos’ de Bogotá, para implementar esquemas de incentivos a la conservación en 1.273 hectáreas del páramo de Guerrero, mediante la suscripción de acuerdos colectivos voluntarios de preservación de áreas de importancia estratégica, con los municipios de Subachoque, Tabio, Zipaquirá, Cogua y Tausa, con una inversión de $2.252.036.997.
Así mismo, en la feria de servicios que se adelantó en esa institución educativa, se suscribieron convenios por valor de $70 millones cada uno para la implementación de viveros forestales en los municipios de Sibaté, San Antonio del Tequendama y Fusagasugá, con el propósito de obtener material vegetal y de esta manera seguir sembrando árboles en las zonas degradadas del territorio cundinamarqués.
Esta estrategia se enmarca en el Plan de Desarrollo Cundinamarca, ¡Región que Progresa! 2020 – 2024, dentro del programa Seguridad hídrica y recursos naturales para la vida, subprograma Cundinamarca al Natural, Meta 282: “conservar 10.000 hectáreas localizadas en áreas de importancia hídrica”.