Corpoguavio vive su naturaleza a través del PRAE
La Institución Educativa Departamental Baldomero Sanín Cano del municipio de Gachalá, con ayuda de la Corporación, implementa su PRAE en producción de lombricompuesto, como estrategia de disminución del uso de abonos químicos para mejorar naturalmente las propiedades fisicoquímicas del suelo.
CORPOGUAVIO en ejercicio de sus competencias, además de brindar acompañamiento técnico, aportó los recursos económicos para construir la estructura y adquirir los elementos necesarios para el proyecto.
El proceso PRAE ha venido siendo liderado por la docente de las áreas de Biología y Química, licenciada Adriana Chávez, y cuenta con 25 jóvenes que se encargan de darle vida a cada una de las fases del proyecto, prestando así su servicio social.
El primer grupo consigue y transporta la materia prima (equinaza) parte fundamental para la producción de lombricompuesto. Esta fue gestionada mediante acuerdo con los propietarios de los criaderos de caballos de paso que se encuentran en el municipio, lo cual tiene doble beneficio, en primer lugar se producen abonos 100% orgánicos como lo es el humus de lombriz y en segundo lugar se gestiona adecuadamente los residuos producidos por los caballos, evitando así contaminar suelo, agua, además de la proliferación de olores y vectores.
El segundo grupo realiza seguimiento a la evolución de la lombriz y al humus controlando humedad, temperatura y alimentado las camas con la equinaza colectada. También son los encargados de realizar la recolección, embasado y almacenamiento del humus líquido.
El tercer grupo está encargado de realizar las pruebas de campo y revisar el grado de efectividad del abono; para ello realizan germinación en cubetas de huevo, las cuales son reutilizadas para este proceso cumpliendo un excelente uso como bandejas germinadoras que luego se convierten en parte del abono al picarse en pequeños pedazos e integrarlo al lombricumpuesto. Este grupo tiene la responsabilidad de determinar por el método prueba y error la proporción suelo-abono, necesaria para garantizar un adecuado desarrollo de las plántulas.
El cuarto grupo se encarga de clasificar el papel usado y picarlo para agregarlo como insumo del proceso de lombricompuesto.
Es importante decir que este proceso fue desarrollado con técnicas de producción limpia de tal forma que no genera contaminación y evita la proliferación de olores y vectores, además posee sistema de recolección de agua lluvia la cual es empleada para mantener la humedad del humus y realizar el riego en los cultivos.
Con proyectos como este se demuestra una vez más que el PRAE es un laboratorio de aprendizaje que, mediante la práctica, permite a los estudiantes adquirir hábitos adecuados en su relación con el ambiente, hábitos que perdurarán en ellos porque son adquiridos dentro de su vivencia diaria, aparte de las cátedras tradiciones.
Además los estudiantes elaboraron una maqueta del proceso, en la que proyectaron nuevas estructuras para un posible sistema de riego, con el fin de optimizar el recurso hídrico y de esta manera seguir el proceso de investigación.